Así es la vida no????
Cuantas veces no escuche decir a mi tía tallo, (como le decía mi hermano menor): “hijos, ya venga a comer”, al llegar enfrente de tan grande mujer, por que mi tía tallo nunca fue el homenaje a lo delgado, y yo contando con un metro escaso de estatura, pues era impresionante ver como tomaba en sus manos una pequeña tortilla, y la hacia rollito, (como me encantaba ver que hiciera eso), no tengo la menor puta idea, pero al ver que mi tía hacia rollito una tortilla, y al ponerle un poquito de sal antes de dicho proceso, me hacia tan, pero tan feliz, que tardaría muchas hojas de Word en describirles como me sentía, contando con unos 5 o 6 años de edad, y presenciar dicho acontecimiento, en fin…
Esas cenas en casa de la tía tallo, mi tío, (el cual me enseño una manera cagadísima de tocar norteño en la guitarra, sus hijos (o sea mis primos), el más grande mi primo: Avi, experto jugador de futbolito, con lo cual llego a comprarse todos los útiles de la secundaria, muy bueno también para el soccer, su hermano: el pollo, el hombre más feo del estado de México, pero un primo que me salvo de muchas madrizas, (gracias pollo), mi primo: “el wito”, un bajista como pocos¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡, te amo mucho primo, nunca olvidare esas tardes tocando las liras afuera de tu casa como a los 12 años, mi prima ana: (la gordota pelotota como siempre le decía), mi prima Sandra, y por último el accidente, o sea mi primo Edgar, ya no se le esperaba, pero de repente llego, mocos¡¡¡¡.
Acompañados de mi familia, eran noches bien chidas, llenas de risas, buena comida, mucha coca-cola, por que mi tío es bien adicto a ese refresco, mmmmmmm, ahora entiendo algunos gustitos que tengo, jiijijij; que escenas tan nostálgicas llegaron a mi mente, de repente, la voz de una persona de esas que ayuda a bajar los ataúdes me interrumpió diciendo: muchacho, por favor páseme la corona, para que se pueda enterrar con la tierra que esta todavía afuera, sin protestar le pasé la corona para que fuera enterrada junto con el cuerpo de mi tía, hice un recorrido con mi vista alrededor, y observe a mi abuela llorando por la muerte de su hija, a mis tías llorando por su hermana, mi tío el menor, fuera de sí, hundido en sus pensamientos, y por último, observe a mi madre, abrazando a mi primo Edgar (el menor), llorando los dos con una tristeza, que terminó por hacerme un terrible nudo en mi garganta, lo cual hizo que unas lagrimas recorrieran mis mejillas llenas de tierra, que triste que desde hace mucho no estoy un fin de semana con mi familia, y tuviera que ser solo para ir a un funeral.
En fin, para muchísima gente en éste puto mundo no paso nada, una noche más, un coto más, una peda más, más sexo para el historial, otra película vista, otro libro leído, pues ya que¡¡¡¡¡¡, así es la vida no?
Como le acabo de decir a alguien: hay huecos en el alma que no se pueden llenar con rock¡¡¡¡.
Carnales, me cae que no esta de más voltear a casa de vez en cuando, y decirle a la familia lo importante que es para uno, al fin y al cabo, ellos son los que nos van a enterrar no?, y no un culero que me haya encontrado en el desmadre.
Nota: me permití quitar algunos fragmentos de la narración, dado que son muy personales, o tal vez ofenderían a algunas personas, y si aun así lo hice, le ofrezco una disculpa, no era la intención, y por último: Charbel, Verito, Santy, Gracias por esas bellas palabras, a veces hace falta oir algo así, los amo y que Dios los bendiga¡¡¡¡¡
See you¡¡¡¡.
Atentamente, su amigo magalo.
Esas cenas en casa de la tía tallo, mi tío, (el cual me enseño una manera cagadísima de tocar norteño en la guitarra, sus hijos (o sea mis primos), el más grande mi primo: Avi, experto jugador de futbolito, con lo cual llego a comprarse todos los útiles de la secundaria, muy bueno también para el soccer, su hermano: el pollo, el hombre más feo del estado de México, pero un primo que me salvo de muchas madrizas, (gracias pollo), mi primo: “el wito”, un bajista como pocos¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡, te amo mucho primo, nunca olvidare esas tardes tocando las liras afuera de tu casa como a los 12 años, mi prima ana: (la gordota pelotota como siempre le decía), mi prima Sandra, y por último el accidente, o sea mi primo Edgar, ya no se le esperaba, pero de repente llego, mocos¡¡¡¡.
Acompañados de mi familia, eran noches bien chidas, llenas de risas, buena comida, mucha coca-cola, por que mi tío es bien adicto a ese refresco, mmmmmmm, ahora entiendo algunos gustitos que tengo, jiijijij; que escenas tan nostálgicas llegaron a mi mente, de repente, la voz de una persona de esas que ayuda a bajar los ataúdes me interrumpió diciendo: muchacho, por favor páseme la corona, para que se pueda enterrar con la tierra que esta todavía afuera, sin protestar le pasé la corona para que fuera enterrada junto con el cuerpo de mi tía, hice un recorrido con mi vista alrededor, y observe a mi abuela llorando por la muerte de su hija, a mis tías llorando por su hermana, mi tío el menor, fuera de sí, hundido en sus pensamientos, y por último, observe a mi madre, abrazando a mi primo Edgar (el menor), llorando los dos con una tristeza, que terminó por hacerme un terrible nudo en mi garganta, lo cual hizo que unas lagrimas recorrieran mis mejillas llenas de tierra, que triste que desde hace mucho no estoy un fin de semana con mi familia, y tuviera que ser solo para ir a un funeral.
En fin, para muchísima gente en éste puto mundo no paso nada, una noche más, un coto más, una peda más, más sexo para el historial, otra película vista, otro libro leído, pues ya que¡¡¡¡¡¡, así es la vida no?
Como le acabo de decir a alguien: hay huecos en el alma que no se pueden llenar con rock¡¡¡¡.
Carnales, me cae que no esta de más voltear a casa de vez en cuando, y decirle a la familia lo importante que es para uno, al fin y al cabo, ellos son los que nos van a enterrar no?, y no un culero que me haya encontrado en el desmadre.
Nota: me permití quitar algunos fragmentos de la narración, dado que son muy personales, o tal vez ofenderían a algunas personas, y si aun así lo hice, le ofrezco una disculpa, no era la intención, y por último: Charbel, Verito, Santy, Gracias por esas bellas palabras, a veces hace falta oir algo así, los amo y que Dios los bendiga¡¡¡¡¡
See you¡¡¡¡.
Atentamente, su amigo magalo.
